Somos una empresa familiar que empezó hace 16 años en el mercado. Iniciar la empresa trajo muchos retos, pero el crecimiento trajo aún más… Cada día nuevo de crecimiento es un reto no solo profesional sino también familiar. Mantener la familia unida, interesar a los socios (es decir, la familia) y pensar en dejar un legado es un reto diario. Desde hace muchos años asistimos al Family Business Summit anualmente, este es un espacio para entender los nuevos retos, direccionar la compañía hacia nuevos horizontes y en especial nos ha ayudado a mantener los procesos familiares y profesionales unidos sin generar mayores conflictos. También nos ha enseñado a proyectar la compañía más allá de los socios fundadores. Gracias a América empresarial y al Family Business Summit.

Asistir a Family Business, me ha ayudado a comprender los desafíos que deben afrontar las empresas familiares; si bien en el día a día existen retos que deben ser sorteados para continuar con el legado ante las nuevas perspectivas generacionales, los procesos globales deben ser encarados igualmente con conocimiento y estrategia, por esas razones este es un espacio que brinda herramientas para transitar todos estos escenarios, definitivamente es una inversión que vale la pena hacer.